Ad Code

Advertisement

Al menos 15 muertos, en su mayoría mujeres, por explosión de coche bomba en Siria

Digital News


Un nuevo ataque sacude el norte de Siria, donde las tensiones entre facciones proturcas y kurdo-sirias siguen en aumento, dejando un saldo de víctimas mortales y heridas.

Artículo:

Este lunes, el norte de Siria volvió a ser escenario de una tragedia. Al menos 15 personas, en su mayoría mujeres, murieron y otras 15 resultaron heridas, varias de ellas con lesiones graves, a raíz de la explosión de un coche bomba en las inmediaciones de la ciudad de Manbech, ubicada en el este de la provincia de Alepo. Según informes de los Cascos Blancos, un grupo de rescatistas locales, las víctimas viajaban en una camioneta cuando un coche bomba explotó cerca de la carretera en la que circulaban.

Entre las víctimas mortales se encuentran 14 mujeres y un hombre, mientras que las heridas son, en su mayoría, también mujeres, lo que aumenta la tragedia en un contexto de creciente violencia en la región. Aunque aún no se ha reivindicado el atentado, el ataque se produce en una zona controlada por facciones proturcas, que han sido un blanco frecuente de atentados similares en los últimos meses.

La explosión es la sexta de este tipo en el norte de Siria desde diciembre de 2024, lo que resalta la intensificación de los ataques en estas áreas bajo el control de grupos respaldados por Turquía. El Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, una ONG que monitorea la situación en el país desde su sede en el Reino Unido, ha reportado que este tipo de atentados se han convertido en una constante amenaza para la población civil en zonas como Manbech, que está en disputa entre las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza kurdo-siria respaldada por Estados Unidos, y los rebeldes sirios proturcos.

El ataque también recuerda la creciente inestabilidad que vive el país, especialmente en el norte, donde las facciones proturcas continúan luchando contra las fuerzas kurdo-sirias en una serie de enfrentamientos que no solo involucran a actores locales, sino que también están siendo influidos por intereses internacionales. En este contexto, la ciudad de Manbech, ubicada estratégicamente cerca de la frontera turca, se ha convertido en un objetivo clave para los rebeldes sirios, que buscan debilitar a las FSD y ampliar su control sobre la región.

Hace tan solo dos días, una explosión similar tuvo lugar en una zona militar de la ciudad de Manbech, en la que murieron 9 personas, incluidos miembros del Ejército Nacional Sirio (SNA), una coalición de rebeldes sirios que luchan junto a las fuerzas proturcas. Además, otras 15 personas resultaron heridas en ese ataque. La continuidad de estos atentados, que afectan principalmente a civiles, evidencia la falta de control y seguridad en las áreas controladas por las facciones proturcas, que han sido blanco frecuente de ataques de grupos armados no identificados, a menudo relacionados con las fuerzas kurdo-sirias o con elementos radicales.

El nuevo atentado ha generado preocupación por la situación en la región y por las dificultades que enfrentan las fuerzas internacionales, como las estadounidenses, para garantizar la estabilidad en el norte de Siria. La violencia no solo afecta a los combatientes, sino también a la población civil que vive atrapada en medio del conflicto. Las explosiones, los enfrentamientos armados y las incursiones de grupos extremistas han desplazado a miles de personas, mientras que las infraestructuras básicas, como hospitales, escuelas y mercados, han sido destruidas o dañadas.

Manbech, una ciudad históricamente de mayoría árabe, ha sido un punto caliente en la lucha por el control del territorio. Desde que fue tomada por las FSD en 2016, la ciudad ha sido testigo de numerosos enfrentamientos, incluidos varios ataques de la oposición armada siria, respaldada por Turquía. En los últimos meses, la situación se ha deteriorado aún más debido a los constantes ataques a la seguridad de la región, lo que ha dejado a las autoridades locales y a la población civil en una situación extremadamente vulnerable.

Hasta ahora, no se ha confirmado la autoría de la explosión, pero los expertos apuntan a los continuos enfrentamientos entre las fuerzas kurdas y los rebeldes sirios como un posible desencadenante de este ataque. A medida que los grupos armados se disputan el control de más áreas, la violencia parece no cesar, lo que aumenta la presión sobre la población civil atrapada en medio del conflicto.

Este nuevo ataque subraya una vez más la creciente violencia en las zonas del norte de Siria, donde los intereses geopolíticos, la intervención extranjera y las facciones locales se combinan en una mezcla peligrosa que mantiene al país al borde de una mayor escalada. La comunidad internacional, aunque preocupada por la situación, sigue siendo incapaz de encontrar una solución efectiva que pueda poner fin a la violencia y ofrecer una vía hacia la paz y la estabilidad en Siria.


Publicar un comentario

0 Comentarios

AINEWS DIGITAL NEWS IN SPANISH