
El TPS, que actualmente permite a más de 600 mil ciudadanos de Venezuela trabajar y residir legalmente en territorio estadounidense, vencerá el próximo 10 de septiembre de 2025. No obstante, la orden emitida por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) podría dejar desprotegidos a miles de beneficiarios en un plazo de 60 días tras su publicación oficial.
El informe señala que la secretaria del DHS, Kristi Noem, justificó la medida tras realizar una revisión de las "condiciones del país" y concluir que el TPS para los venezolanos resulta "contrario" al interés nacional de Estados Unidos. Esta decisión pone fin a una extensión de protección aprobada durante el gobierno de Joe Biden, que había garantizado el alivio migratorio hasta octubre de 2026.
El TPS es un mecanismo que Estados Unidos ofrece a ciudadanos de países afectados por conflictos armados o desastres naturales, permitiéndoles residir y trabajar legalmente hasta que las condiciones en sus países de origen mejoren. Para los venezolanos, este estatus se otorgó inicialmente en respuesta a la crisis económica y política que afecta a la nación sudamericana desde hace varios años.
Sin embargo, según lo filtrado por el Times, la decisión actual solo afectará a unos 300 mil venezolanos que obtuvieron la protección en 2023. Cerca de 250 mil que aún conservan el beneficio hasta septiembre de este año no estarán bajo riesgo inmediato.
Esta revocación se produce en medio de un acuerdo reciente anunciado por Trump, donde Venezuela habría aceptado recibir a ciudadanos deportados desde Estados Unidos y encargarse de su transporte.
La medida ha generado una oleada de críticas por parte de defensores de los derechos de los migrantes y organizaciones proinmigrantes que califican la acción como una estrategia política que ignora las condiciones críticas en Venezuela.
Cabe recordar que durante su primer mandato, Trump intentó poner fin a las protecciones para migrantes de países como Haití, El Salvador y Sudán, aunque en varios casos los tribunales federales bloquearon esas iniciativas.
La comunidad venezolana en Estados Unidos ahora enfrenta un clima de incertidumbre y preocupación. Luis Mendoza, un venezolano beneficiario del TPS desde 2023, expresó su angustia: "Nos quedamos sin opciones claras; regresar a Venezuela no es seguro para muchos de nosotros".
A medida que se espera la oficialización de la medida, diversas organizaciones han instado al Congreso y a la comunidad internacional a intervenir para proteger a los migrantes que podrían quedar en situación irregular en un corto plazo. Por su parte, el gobierno de Venezuela aún no ha emitido una respuesta oficial sobre la situación.
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