Caída histórica en Wall Street sacude al mundo financiero por nueva guerra comercial entre EE UU y China

Economía | Alejandro Cruz

El desplome bursátil es el mayor desde la pandemia de 2020 y agita temores de recesión global tras represalias arancelarias

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La Bolsa de Nueva York vivió este viernes una jornada negra que hizo temblar a los mercados financieros internacionales. Con una caída cercana al 6 por ciento, Wall Street registró su peor sesión desde el inicio de la pandemia en 2020, arrastrada por el recrudecimiento de la guerra comercial entre Estados Unidos y China. El conflicto, reactivado por una ofensiva arancelaria impulsada por el presidente Donald Trump, generó una inmediata respuesta de Pekín, que impuso sanciones económicas de igual magnitud, desatando el pánico entre los inversores.

El índice Dow Jones cayó un 5,50 por ciento, el Nasdaq perdió un 5,82 por ciento y el S&P 500 se desplomó un 5,97 por ciento, en medio de una jornada marcada por la alta volatilidad y el temor a una nueva recesión. Esta doble jornada de pérdidas ha borrado más de 6,4 billones de dólares en valor bursátil, según estimaciones de The Wall Street Journal, alcanzando los 10 billones si se toma en cuenta el saldo desde el regreso de Trump a la Casa Blanca.

Los mercados reflejan no solo el miedo al estancamiento económico estadounidense, sino también a un posible contagio global. La bolsa mexicana, por ejemplo, también se hundió casi un 5 por ciento, y se teme que el efecto dominó llegue a otras economías emergentes y a Europa.

Todos los sectores corporativos cerraron en rojo. Las compañías energéticas como ConocoPhillips y Chevron encabezaron las pérdidas con retrocesos de hasta 9,5 por ciento, seguidas por los gigantes tecnológicos Tesla y Nvidia, que también cayeron más de 7 puntos. Las entidades financieras, como JPMorgan y Citigroup, no escaparon al golpe y terminaron con pérdidas superiores al 7 por ciento.

En medio del desplome, Trump instó al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, a reducir las tasas de interés como medida de contención. Sin embargo, la respuesta del banco central fue todo lo contrario a lo que esperaba la Casa Blanca. Powell advirtió que los aranceles probablemente impulsarán la inflación y frenarán el crecimiento, lo cual empeoró el ánimo en los mercados.

La posibilidad de una guerra comercial prolongada podría comprometer la recuperación económica global y volver a generar un entorno de incertidumbre similar al vivido durante los peores meses del coronavirus. Esta nueva escalada de tensiones entre las dos principales economías del planeta deja a los inversionistas, gobiernos y empresas al borde del abismo, sin claridad sobre el rumbo económico de los próximos meses.